El insaciable apetito de polla de la asiática española Katana la vuelve loca. Anhela cada centímetro de una enorme polla negra, tomándola ansiosamente profundamente. Su experta boca hace maravillas, dejándolo cubierto de leche cálida y cremosa. Esta sesión privada es un testimonio de su deseo insacible y su sed insaciables.