El dormitorio de su hermanastro se convierte en un punto candente de placer prohibido al seducir a sus hermanastras.Las bombas rubia y morena, Mia y su amiga, ceden con ansias, cabalgándolo en vaquera, entregando delicias orales y rindiéndose a su dedo y penetrando placeres.El clímax los deja a las dos extasiadas.